Quizá no sea este un destino para quien busque en sus viajes las mismas comodidades que encuentra en casa pero en versión más exótica. Pero quien esté dispuesto a renunciar a alguna comodidad, que se prepare: el “País de las Águilas” es uno de los pocos lugares de Europa donde un viaje aún se puede transformar en una pequeña aventura.
Albania parece un mosaico veneciano. Hay contrastes, como las piedras de mil colores diferentes, pero se amalgaman en una combinación única que refleja la belleza de las múltiples piezas que la componen. Durante el viaje se verán iglesias bizantinas con frescos y mezquitas desnudas, tekke bekta-shíes pintadas y casas otomanas de un blanco cándido, mastodónticos kombinat y minúsculos búnkeres. Albania es como un gran museo al aire libre que expone obras curiosas y magníficas estructuras, protegido por montañas infranqueables y por un mar de un azul nunca visto. 400 km en los que la arena del Adriático se funde con las piedras de las playas Jónicas
Preparate para la Gran Aventura en Albania !